EMILIA ZAFRA, Madrid
El concepto de sostenibilidad desempeña ya un papel protagonista en la búsqueda de vivienda. Según los datos del reciente estudio La sostenibilidad de la demanda de vivienda en España, realizado por Fotocasa y Solvia, al menos un 95,3% de ciudadanos que desea cambiar de domicilio busca un inmueble sostenible. E incluso muchos de ellos, un 54%, según los datos del análisis, estarían dispuestos a pagar un precio mayor, no solo para que su casa sea más eficiente energéticamente sino también para que tenga el menor impacto ambiental posible.
Los edificios son responsables del 40% de las emisiones de gases contaminantes y de un tercio del dióxido de carbono emitido a la atmósfera, según los cálculos de la Comisión Europea. Por ello, la rehabilitación del parque de viviendas es una prioridad “para avanzar en la transición verde y luchar contra el cambio climático”, admite José Manuel Merino, director general de Fotocasa. De hecho, según el estudio del portal inmobiliario, solo un 21% de los encuestados valoraba la sostenibilidad de una vivienda con el único fin de ahorrar costes futuros, mientras que el resto, casi un 80%, expresaba su inclinación por la necesidad de contribuir a frenar el aumento de las temperaturas en el planeta.
“La sostenibilidad ha pasado de ser una demanda de unos pocos a un movimiento de toda una sociedad”, apunta Dolores Huerta, directora general del Green Building Council España, una organización que promueve una edificación sostenible. De la misma opinión es José Luis Bellosta, presidente de Solvia, para quien “la apuesta por la sostenibilidad en el sector inmobiliario es una prioridad”.
Reformas
Entre los compradores de vivienda de segunda mano, el 82% valora que se aproveche al máximo la luz y el agua para reducir el consumo, que el inmueble esté dotado de electrodomésticos eficientes y que se empleen fuentes de energía renovables. Por ello, o bien cuentan con que deberán reformar la casa que adquirirán o buscan apartamentos reformados con materiales sostenibles y la mayor eficiencia energética posible.
Pero entre aquellos que se plantean la realización de una rehabilitación en su hogar, ya sea en la vivienda actual o en una futura, las prioridades de inversión son, por este orden, el correcto aislamiento de las ventanas, la actualización de los muebles y electrodomésticos de la cocina, la mejora del aislamiento térmico de paredes y techos, el cambio de caldera a una más eficiente, la reforma del baño y un aparato de aire acondicionado de bajo consumo. Todas estas preferencias demuestran, según el estudio de Fotocasa y Solvia, el creciente interés por la protección del medio ambiente.
Pero además, la reforma de la vivienda, en función del nivel de rehabilitación y de los materiales empleados, puede conllevar, según Idealista, una importante revalorización del inmueble. “Actualmente, de media en España una vivienda reformada vale un 24% más que si no lo está”, aseguran fuentes del portal inmobiliario tras un análisis exhaustivo de los precios de las viviendas que publican.